CONFUSOS COMIENZOS

Cuando decidimos comenzar, lo primero que hicimos fue ir a la ciudad. Fuimos con Ana un sábado en la mañana, nada más que a recorrerla. La idea era encontrar un posible lugar para establecer la iglesia. En mi interior lo que yo buscaba era una señal, una confirmación sobrenatural, algo que me dijera "este es el lugar". Nada sucedió. Terminamos almorzando en un restaurante huyendo de una repentina lluvia. Yo me sentí un poco frustado.Volvimos un par de sábados después. Vimos algunas cosas más. Por ejemplo que en el downtown, en el mero centro, no había espacio para establecer una iglesia. Vimos un par de locales cerrados, pero no tenían estacionamiento. La otra opción eran templos de otras iglesias pero ya estaban alejados del centro.
De todos modos, desde hacía casi un año, cada vez que pasaba por un lugar, entrando a la ciudad, yo sentía "algo". Era un lugar donde la autopista interestatal 24 desciende justo llegando a la ciudad. Por unos dos o tres minutos uno tiene una vista panorámica de la ciudad que se extiende allá abajo. Luego una curva descendiente y cerrada te mete en la ciudad, es la salida 181. Pasé muchas veces por ahi, sin entrar nunca, pero "sintiendo algo".
Al cabo de uno meses, no teníamos nada todavía. Así que decidí buscar un hotel, para rentar una sala y comenzar allí. Pero Dios tenía otro plan.