LA VIDA Y LA MUERTE EN UNA MAÑANA

Esta mañana fui avisado de que una joven madre que asiste a nuestra iglesia dio a luz un bello bebé. Ella había perdido su embarazo anterior, y su propia vida estuvo signada por la muerte aún desde antes de nacer. Escuché su testimonio hace unos días y con una gran fe ella aseguraba que su hijo iba a nacer bien y saludable. Conforme creyó fue hecho. En mi teléfono celular recibí una foto de ella abrazando con gran ternura a su hijito recién nacido.
Un par de horas después recibí otro llamado anunciando el fallecimiento de la mamá de otra joven madre, líder de nuestra iglesia. La llamé enseguida y obviamente estaba muy triste, pero con el consuelo que sólo un creyente en Dios puede tener. Su mamá nunca fue cristiana, pero había aceptado a Cristo hace un mes atrás...
La vida y la muerte en una sola mañana. Así es el trabajo de un Pastor. Por algo Jesús nos enseñó a "reir con los que ríen y llorar con los que lloran..."